
Filtraciones por el techo e incendios: amenazas para todo el edificio desde la cubierta
La cubierta de un edificio no es solo una simple capa de cierre: es una parte fundamental de la envolvente de la construcción, que actúa como barrera y protección contra el agua y el viento y, por lo tanto, es un elemento crucial para la seguridad de toda la estructura.
Las filtraciones de agua por el techo suelen ser una pesadilla para vecinos y constructores. La impermeabilidad del techo garantiza la estanquidad del edificio, el bienestar de sus ocupantes y la durabilidad del proyecto; además, su aislamiento tiene un papel esencial en el rendimiento térmico y en evitar la aparición de mohos y de humedad.
Soluciones con baja resistencia al fuego, malas elecciones de los conductos de humo y escasa atención a la reacción al fuego hacen que el techo sea una parte con un alto riesgo de incendio, siendo, a menudo, la primera en verse afectada cuando se produce un incendio en una vivienda.
Por sí mismos, estos factores deberían ser suficientes para aclarar por qué el diseño de todo el paquete de cubierta y su realización requieren soluciones de alto nivel, aplicadas según las reglas de la buena técnica; sin embargo, las cubiertas siguen siendo la parte de los edificios en las que, a menudo de manera miope, se sigue ahorrando más, tanto en la calidad de los materiales como en la correcta instalación de los sistemas impermeabilizantes e ignífugos.
Diseñadores y empresas conocen bien la teoría: una lámina bien elegida y colocada correctamente es la primera protección contra la entrada de agua y la formación de condensación. Sin embargo, en muchos casos reales, perfectamente documentados, conocer la teoría no significa saber ponerla en práctica de manera eficaz. ¿El resultado? Filtraciones en los paquetes de cubierta, podredumbre de los paneles estructurales, derrumbes localizados, incendios, graves daños económicos, litigios y, en los casos más extremos, pérdida de vidas humanas.

El caso de Vitsoe: una lámina mal colocada y daños por un valor de cuatro millones
Entre los casos recientes más significativos destaca el que involucró a la empresa Vitsoe y al estudio de arquitectura Waugh Thistleton en el Reino Unido.
El proyecto de la sede de Vitsoe de Leamington Spa preveía un suelo de CLT, pero la barrera de vapor se aplicó sobre paneles húmedos, con la consiguiente escalada de daños.
¿Qué fue lo que pasó?
Como determinó el tribunal, los paneles del techo se habían mojado demasiado durante la fase de construcción. Aunque estaba previsto instalar una cubierta tan solo dos semanas después de terminar la estructura de madera, los retrasos hicieron que los paneles de CLT quedaran expuestos a la intemperie durante varios meses durante el invierno de 2016/17. Cuando finalmente se instaló el techo, los paneles habían absorbido una gran cantidad de agua.
Atrapada bajo la lámina, la humedad acumulada provocó un proceso de podredumbre interna.
El daño para los clientes fue catastróficos: se tuvo que sustituir toda la cubierta.
¿Cuánto costó? Más de 4,4 millones de libras esterlinas, equivalentes a aproximadamente 1.527 €/m². Cifra que Vitsoe reclamó a Waugh Thistleton en los tribunales.
Sin embargo, una artimaña sobre la correcta planificación de la construcción del techo permitió al juez fallar en contra de la indemnización, lo que evitó que Waugh Thistleton tuviera que pagar millones por daños, a la vez que complicó la posición del contratista de las estructuras de madera, que estuvo a punto de verse implicado en la causa.
Con independencia del resultado, este caso pone de relieve una cuestión candente: sin duda alguna, invertir (poco) en la fase de construcción resulta más ventajoso que arriesgarse a tener que pagar indemnizaciones millonarias por daños, y adquiere un significado aún más paradójico si se tiene en cuenta que solo se requiere una simple protección temporal de la obra cuyo coste medio es de 10 €/m².
La historia, documentada por el Architects’ Journal, dejó una profunda huella en el sector de la construcción en madera y sirvió para resaltar la importancia de proteger los materiales para los techos, también durante la construcción.

Universidad de Tuscia: láminas en llamas y techo derrumbado, no solo la madera supone un peligro.
En Italia, un suceso reciente ha demostrado los peligros derivados del uso incorrecto de materiales combustibles en la cubierta y, sobre todo, que la madera en sí misma no es un factor de riesgo.
El 4 de junio de 2025, durante una intervención de mantenimiento en la Facultad de Agronomía de la Universidad de Tuscia, se declaró un incendio. Las llamas, provocadas por un soplete de gas utilizado para colocar una lámina bituminosa, se propagaron rápidamente por dicha lámina. Debido a la presencia de materiales inflamables (como etanol y bombonas de gas) en los laboratorios que había debajo, el fuego se propagó por toda la segunda planta. La universidad tuvo que cerrar durante varios días y aún se están evaluando los daños estructurales. El caso, recogido por el diario la Repubblica, obliga a hacerse una pregunta: ¿por qué se sigue permitiendo el uso de vainas inflamables en las cubiertas de edificios con un elevado riesgo de propagación de incendios sin una estratigrafía ignífuga certificada?

Filtraciones por el techo, podredumbre estructural y tribunales: el caso de Rovigo
Otro ejemplo emblemático proviene del Tribunal de Rovigo, que en el año 2024 dictó sentencia (n.º 316/2024) en un pleito entre cliente, empresa y director de obras. Motivo del juicio: una cubierta de CLT que presentaba podredumbre generalizada y aislantes completamente mojados. El juez determinó que la causa se debía a la falta de protección del paquete de cubierta durante las fases de construcción. Los paneles habían quedado expuestos a la intemperie durante varias semanas, sin protegerlos con láminas temporales, y la instalación final se había realizado sin comprobar la humedad residual. El asesor técnico de oficio ordenó la remoción de algunos paneles estructurales y la sustitución de todo el paquete de aislamiento.

Campus Berkeley: cuando la podredumbre mata
Sin embargo, el caso más trágico sigue siendo el del derrumbe de un balcón en el campus de Berkeley, California, en 2015.
La estructura, que formaba parte de un complejo residencial para estudiantes, se vino abajo repentinamente durante una fiesta, mientras había ocho personas en ella. Seis murieron en el acto. Tras realizar las debidas investigaciones técnicas, se supuso que las vigas portantes estaban gravemente dañadas por podredumbre, causada por filtraciones de agua constantes y por falta de mantenimiento. No había ninguna lámina transpirable que protegiera la estructura interna: una vez que la humedad entraba, no podía salir.
Tras este episodio, el sector de la construcción californiano tomó conciencia del problema y se estableció la obligación de realizar inspecciones anuales de las estructuras públicas: solo en los seis meses siguientes, decenas de estructuras fueron declaradas en riesgo debido a la presencia de filtraciones, incluyendo dos terrazas que se derrumbaron poco después en la misma ciudad.

Más allá de la protección: diseñar todo el sistema
De estos casos, emergen algunos principios fundamentales: no es que la madera presente más riesgos que el hormigón, no es suficiente confiar en que "no ocurrirá en mi proyecto", no se puede dar prioridad al ahorro en lugar de minimizar los riesgos y ni tan siquiera es suficiente elegir una lámina cualquiera. Se necesita un sistema coherente. La lámina debe ser impermeable al agua, pero también transpirable al vapor, resistente a los rayos UV si queda a la vista e ignífuga siempre que sea necesario, sobre todo si se coloca en fachadas ventiladas o en estructuras públicas. Además, debe ser compatible con las cintas y los adhesivos de toda la estratigrafía y, lo más importante, debe preverse para proteger los materiales desde la fase de construcción. Solo un diseño integrado garantiza las prestaciones y la durabilidad de todo un edificio.
Rothoblaas ofrece sistemas completos para cubiertas de madera, y no solo, que cumplen con todos estos criterios. Las láminas TRASPIR, BARRIER, VAPOR y ALU han sido probadas en combinación con las correspondientes cintas, juntas y adhesivos. Algunas versiones alcanzan la Euroclase A2-s1, d0 en cuanto a reacción al fuego, siendo ideales también para edificios públicos, escolares o protegidos. Además, gracias a la disponibilidad de versiones de alta resistencia a los rayos UV y a láminas como DEFENCE ADHESIVE, es posible proteger estructuras de madera ya en la obra, con lo cual se evita el uso de láminas provisionales poco fiables o la instalación apresurada de capas finales sobre soportes todavía húmedos.

Una cuestión de prevención, tanto económica como cultural
El coste medio de una lámina adhesiva para cubiertas, transpirable e impermeable, rápida de instalar, oscila entre 6 y 15 euros por metro cuadrado. Los daños ilustrados en este artículo superan, en todos los casos, los cientos de miles de euros, si no de millones, sin mencionar las enormes consecuencias en términos de riesgos para las personas, las estructuras y la reputación de las empresas.
El retorno de la inversión es evidente: invertir hoy en una estratigrafía correcta significa evitar demoliciones o derrumbes en el mañana.
Más que de una cuestión técnica, se trata de adquirir una cultura de la prevención para promoverla, documentarla y exigir en todos los proyectos. Los techos no son solo protección: son la primera frontera entre durabilidad y degradación. Y la elección de las láminas no es un aspecto menor. Es una responsabilidad. Empieza por aquí: https://www.rothoblaas.es/productos/hermeticidad-e-impermeabilizacion
Reproducción reservada
Detalles técnicos
- Empresas:
- Rothoblaas
- País:
- Any
- Productos:
- TRASPIR 110 TRASPIR 115 TRASPIR 115 FR TRASPIR 135 TRASPIR 150 TRASPIR 170 TRASPIR 190 TRASPIR 200 TRASPIR 205 TRASPIR 75 BARRIER 150 BARRIER 40 BARRIER ALU FIRE A2 SD2500 BARRIER ALU NET ADHESIVE 300 BARRIER ALU NET SD150 BARRIER ALU NET SD1500 BARRIER NET SD40 BARRIER NET ADHESIVE 200 BARRIER SD150 BARRIER SD90 VAPOR 140 VAPOR 150 VAPOR 225 VAPOR ADHESIVE 260 VAPOR EVO 190 VAPOR IN 120 VAPOR IN GREEN 200 VAPOR IN NET 140 VAPOR NET 110 VAPOR NET 180 ALU BAND ALU BUTYL BAND ALU FLASH CONNECT ALU START ALU TERRACE DEFENCE ADHESIVE